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Los trabajadores de la pizarrera valdeorresa Irosa-Samaca respiran tranquilos ante el acuerdo firmado ante notario entre empresa y comuneros. Se resuelve así un litigio que tiene casi una década en relación a la propiedad de los terrenos. Esta misma semana el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia anulaba la declaración de expropiación de montes comunales a favor de la pizarrera. Tras la ruptura de un preacuerdo, la negociación fructificó ayer miércoles 29 de noviembre ante notario.

El grupo pizarrero Irosa-Samaca y la Comunidad de Montes Portela-Trigal han llegado este martes a un acuerdo para poner fin al litigio por la propiedad del suelo que impedía la actividad de la empresa y, con ello, mantener los mas de 200 puestos de trabajo. Si el TSXG da la razón a los comuneros, la empresa podrá alquilar el suelo durante los próximos once años, prorrogables, para la actividad. Si la sentencia es favorable para Irosa Samaca, esta podrá trabajar indefinidamente. Con este entendimiento solicitarán al juzgado que ponga fin al desahucio programado para el día 29 de noviembre y que se dé, de este modo, continuidad a la empresa por mínimo otros once años.

El pasado viernes el grupo Samaca Irosa llegó a un preacuerdo con la junta de montes de Portela-O Trigal para, entre otros temas, firmar un nuevo contrato de alquiler por los terrenos y evitar así el desahucio previsto para el día 29 (acordado por el juzgado a solicitud de los comuneros después porque la empresa no está pagando arriendo desde el 2015). En la negociación se incluye también la reapertura de Samaca, que fue desahuciada a mediados de septiembre. Se habló del lunes como la fecha para que la parte comercial del grupo volviese a estar en funcionamiento en sus instalaciones, pero no fue así. La posible reapertura de esa zona está pendiente de la firma del acuerdo, que se prevé hoy.

El grupo Samaca Irosa y los comuneros de Portela-O Trigal (Carballeda de Valdeorras) llegaron a un preacuerdo sobre el alquiler de los terrenos en mano común que ocupa la pizarrera. De esta forma se frenaría el desahucio previsto para el día 29, la fecha señalada por el Juzgado de O Barco para hacer cumplir una sentencia anterior y tras el intento fracasado del pasado mes de septiembre. En aquel momento la comitiva judicial desalojó las instalaciones de Samaca, aunque los trabajadores se opusieron al cierre de las naves de Irosa, la parte del grupo que se ocupa de la extracción y elaboración. Como primer paso, el lunes reabrirá Samaca.

Medio centenar de trabajadores bercianos están pendientes de que se permita dar una solución de operatividad a la cantera de Irosa-Samaca, ubicada en el municipio valdeorrés de Carballeda, una empresa que se debate entre una sentencia de desahucio y el reconocimiento del interés publico y la concesión de terrenos que le otorgó la Xunta de Galicia ante las discrepancias en el pago de arrendamiento que le pedían los propietarios comuneros. La pizarrera tiene 11 construcciones ubicadas en la parcela afectada y cuentan con una plantilla total de 300 operarios. La solución debe llegar antes del 29 de noviembre, fecha en la que el juzgado ha fijado la ejecución del lanzamiento.