Astara Mobility Sa

El grupo Bergé ha suspendido la salida a Bolsa de su filial de automoción Astara Mobility al no haber logrado despertar el interés esperado entre los inversores. La suspensión de la salida a Bolsa de Astara Mobility abre ahora la puerta a que la compañía explore una solución en los mercados privados, más sencilla, para atender las demandas de liquidez de algunos de sus accionistas. El 75% de la filial está controlado por el grupo Bergé, mientras que Mitsubishi Corporation mantiene el 25% restante. La operación mezclaba un tramo de oferta pública de venta (OPV) y una ampliación de capital (OPS). Astara elevó un 14% sus ingresos en 2023, hasta 5.211 millones, y logró un ebitda de 306 millones.

Astara Mobility ha contratado a la consultora Boston Consulting Group (BCG) para la elaboración del plan estratégico con el que la filial de automoción del grupo Bergé se va a presentar a los inversores durante el road show internacional que prevé celebrar a mediados de abril, en el contexto de su próxima salida a Bolsa. El hilo conductor de la nueva estrategia es la transformación de Astara en una plataforma integrada de movilidad bajo el paraguas del grupo Bergé. En la operación, Astara quiere captar unos 600 millones de euros a través de una OPV y una OPS para acelerar su transformación; además podrían subir recursos al grupo, para ello se colocará entre el 30% y 49% de su accionariado.

Astara Mobility ha comunicado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) y a Bolsas y Mercados Españoles (BME) su intención de salir a bolsa el 25 de abril. La compañía espera recibir de la CNMV el visto bueno al folleto de su salida a bolsa en la primera semana de abril para iniciar la colocación a partir del viernes 8, según han confirmado varias fuentes a un diario digital. Las familias Bergé y la Gorbeña tienen previsto vender tanto acciones viejas (OPV) como títulos de nueva emisión (OPS), con el objetivo de captar entre 400 y 600 millones de euros con la venta de cerca de al menos un tercio del capital de la sociedad, pero no más de un 49%.

Astara, filial del grupo Bergé, ha acordado con la banca la refinanciación de 286 millones de su pasivo, que asciende a los 687 millones. La operación supone que el grupo allane el camino hacia un debut bursátil, que busca para la primera mitad del año con una valoración de unos 2.000 millones de euros. La empresa ha alcanzado con siete entidades financieras un acuerdo por el que prolonga los vencimientos de su pasivo a entre 2025 y 2028. La nueva deuda se compone de un crédito revolving de 150 millones, que expira en 2025. Y dos préstamos a plazo, de 75 y 60 millones, con vencimiento en 2028. En el acuerdo han participado BBVA, Santander, BNP Paribas, CaixaBank, Citi, HSBC y Kutxabank.

Astara Mobility ya ha completado el sindicato de bancos encargados de su estreno bursátil, con el que aspira a captar más de 500 millones. BNP Paribas, HSBC y Morgan Stanley liderarán la operación como coordinadores globales, mientras que Citi, Deutsche Bank y Banco Santander desempeñarán el papel de bookrunners. El tercer escalón de bancos corresponde a BBVA, CaixaBank, JB Capital y Norbolsa con el rol de colead arrengers, según fuentes del mercado. Lazard es el asesor financiero del grupo en todo el proceso. El calendario tentativo de la operación apunta a finales de marzo para su debut en la Bolsa de Madrid. La operación combinará una OPV y una OPS.