Puig Sl

Puig pone los ojos en reordenar su deuda junto a su salida a Bolsa. La compañía afirma en su folleto que dedicará los 1.250 millones que aspira levantar con su ampliación de capital a recortar el pasivo, tras arrojar a cierre de 2023 una deuda neta de 1.509 millones. Prevé dedicar en torno a un tercio de la ampliación, 435 millones, a cancelar una serie de préstamos rubricados a principios de año. Además, dedicará otros 207 millones a pagar a los accionistas minoritarios de Charlotte Tilbury y otros 186 millones a repagar otro préstamo firmado este año. Afirma que dedicará el resto de los fondos obtenidos a repagar una parte de la deuda no corriente de la compañía, por hasta 279 millones.

Puig saldrá a Bolsa el próximo 3 de mayo. Es la fecha marcada en el calendario por la compañía catalana, según la información contenida en el folleto que depositó ayer en la CNMV, para estrenarse en el parqué a un precio de entre 22 y 24,5 euros por acción. La operación, la más importante de este tipo en Europa este año, valora el 100% del grupo cosmético en un máximo de 13.900 millones y un mínimo de 12.700 millones, asumiendo que el valor de las nuevas acciones de clase B, que son las que se lanzarán al mercado y que conceden menos derechos de voto, sea el mismo que las de clase A ya preexistentes. La compañía espera obtener cerca de 3.000 millones en el rango alto de la horquilla.

El grupo Puig ha reforzado en los últimos meses su comité ejecutivo, liderado por Marc Puig. La empresa ha sumado a su cúpula directiva a dos ejecutivos de perfil internacional que han asumido la dirección de recursos humanos y la presidencia de la división de dermocosmética. La última en incorporarse al comité de dirección del grupo es Marine de Boucaud, que entró en Puig en diciembre pasado y que ha sido nombrada máxima responsable del área de recursos humanos. Completan el comité ejecutivo Marc Toulemonde, Joan Albiol, José Manuel Albesa, Javier Bach, Eugenia de la Torriente y Demetra Pinsent.

Marian Puig ha sido nombrado consejero de Puig SL. Este movimiento llega después de que Marian abandonase el Consejo de Administración de Puig Brands SA. Se desconoce si también se recolocará dentro del entramado societario a Jordi Puig Alsina y Xavier Puig Alsina, los otros dos miembros que han abandonado el Consejo de Administración de Puig Brands SA.

Los bancos encargados de la colocación de las acciones de Puig de cara a su debut bursátil están tanteando ya el interés de los inversores por acudir a la operación, y todo apunta a que el salto de la compañía a los mercados puede ser exitosa si su capitalización se sitúa entre los 10.000 millones y 12.000 millones. El propósito de la firma catalana es captar 1.250 millones con la OPS y una cantidad igual o superior con la OPV. Además, los inversores minoritarios en las filiales Charlotte Tilbury y Byredo recibirán acciones de Puig valoradas en 420 millones. Al final de la operación, se espera un free float en Puig de entre el 25%-30% del capital.