Yego Urban Mobility S.l.

El Ayuntamiento de Zaragoza ha autorizado a la empresa Yego para desplegar, a partir del 1 de marzo, en principio hasta doscientas motos eléctricas compartidas a lo largo de los próximos 3 años. En la actualidad, Yego ofrece este tipo de servicio en otras ocho ciudades y áreas metropolitanas: Barcelona, Valencia, Sevilla y Málaga, en España; y París, Burdeos, Toulouse y Niza, en Francia. Yego es pionera en Europa en el ámbito de las motos eléctricas compartidas, contando con más de 700.000 usuarios y 15 millones de trayectos en las ciudades en las que está presente.

La Consejería de Salud y Consumo de la Junta ha decidido sancionar con 5.201 euros a Yego Urban Mobility España SL, dedicada al alquiler de motocicletas eléctricas, por introducir cláusulas abusivas en los contratos y no facilitar los datos para poder reclamar. La empresa ha reconocido su responsabilidad y ya ha abonado la multa, que, con la reducción del 40% por asumir las infracciones, ha quedado establecida en 3.120,60 euros.

Cooltra y Yego, dos empresas nacidas en la capital catalana, se han adjudicado el servicio de motos compartidas de París para los próximos cinco años. Junto a ellas, también ha sido elegida la firma local Cityscoot, líder del sector en Francia. Cooltra, Yego y Cityscoot deberán firmar ahora un contrato de ocupación del espacio público que les autorizará a desplegar su flota durante los próximos cinco años. De acuerdo con los términos de la convocatoria, cada empresa podrá sacar a la calle hasta 2.500 motos durante los dos primeros años y alcanzar las 3.000 a partir de 2026.

La Consejería de Salud y Consumo de Andalucía ha abierto un expediente sancionador contra CABIFY por no ofrecer suficiente información a los usuarios sobre sus derechos cuando contratan un servicio con la empresa de VTC tras la denuncia presentada por Facua. La federación había denunciado a la multinacional en el marco de una campaña de control a las principales empresas de movilidad urbana tras constatar que Cabify no disponía en su página web y aplicación de modelos de hojas de reclamaciones oficiales, algo a lo que obliga la legislación andaluza de protección de los consumidores. Las otras denunciadas por este motivo fueron UBER, LIME, YEGO, REBY, MUVING y ACCIONA, ha indicado Facua.

Después de consolidar su negocio de motosharing por minutos en Barcelona o París, YEGO ha decidido entrar en el segmento de servicios a empresas (B2B, por sus siglas en inglés) como fórmula para incrementar la productividad de sus flotas y crecer en las urbes en las que ya está presente. La firma ha desarrollado la plataforma Yego Pro, a través de la cual sus clientes corporativos pueden usar las motos de la marca a pie de calle para realizar trayectos profesionales. YEGO tiene 632 motos en Barcelona y prevé cerrar el año con una facturación de siete millones tras entrar el pasado junio en París con una flota de mil motos. En 2022 espera alcanzar unos ingresos de diez millones de euros.