Gtceisu Construccion Sa

Terratest, compañía internacional de referencia en ingeniería geotécnica y soluciones de cimentación especial controlada por el fondo Nazca, negocia una reestructuración de su deuda un año después de lograr un acuerdo de refinanciación. La compañía ha cedido el control de su filial estadounidense a Tikehau, y ha abierto un proceso de renegociación para el pasivo con todo el grupo que supera los 100 millones de euros. Gtceisu Construcción, sociedad cabecera del negocio de Terratest, registró ingresos por 203,7 millones en 2022, un 18% más que en el mismo periodo del año anterior (171,7 millones). El ebidta fue positivo en 0,9 millones y perdió 20 millones.

Terratest ha contratado los servicios de Houlihan Lokey para explorar opciones estratégicas con las que desapalancar su negocio, entre las que se incluye la venta de su filial en EEUU, según fuentes del mercado que precisan que el grupo puede obtener 100 millones, aproximadamente, con la transacción. La división estadounidense de Terratest despierta interés en el mercado por sus buenas perspectivas de crecimiento. La eventual venta de la filial en EEUU de Terratest está contemplada en el plan de reestructuración pactado el verano pasado con Tikehau Capital, el principal acreedor de la empresa, y el dinero que se obtenga se destinaría a reducir deuda.

Terratest ha puesto en marcha un nuevo plan estratégico con el que pretende volver a los crecimientos y rentabilidad previos al Covid. La firma ha renovado la dirección, refinanciado deuda y ejecutado un plan de desinversiones con el fin de llegar este año a los 215 millones de facturación, elevar los márgenes operativos por encima del 11% y bajar el apalancamiento. El encargado de llevar las riendas del grupo será José Montero. El nuevo CEO de la compañía releva a Enrique Torres, que ha sido nombrado presidente no ejecutivo.

Terratest ha puesto en marcha un nuevo plan estratégico con el que pretende volver a los crecimientos y rentabilidad previos al Covid. La firma ha renovado la dirección, refinanciado deuda y ejecutado un plan de desinversiones con el fin de llegar este año a los 215 millones de facturación, elevar los márgenes operativos por encima del 11% y bajar el apalancamiento. Por otro lado, la empresa ha alcanzado un acuerdo para vender su negocio de microtunelación a la israelí Rimon Drilling. Con los fondos por las desinversiones, Terratest hará frente a la deuda contraída con Tikehau, que le ha dado casi dos años más de plazo para atender sus obligaciones financieras.

TERRATEST ha obtenido líneas de crédito y nueva liquidez por valor de 30 millones de euros que le permitirá retomar el plan de crecimiento del grupo especializado en movimiento de tierras. Los fondos han salido de una combinación de aportaciones. La institución pública crediticia COFIDES ha prestado a TERRATEST 15 millones de euros. El resto de los fondos, hasta 30 millones de euros, son aportaciones de los socios. En concreto, el fondo NAZCA CAPITAL, Aberdeen y el resto de accionistas han aportado otros 10 millones a través de una ampliación de capital. Los 5 millones restantes proceden de la capitalización de intereses de los bonos entre enero y junio acordada con los bonistas.